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un zoológico, también llamado jardín zoológico, casa de fieras o simplemente zoo, es una instalación de carácter privado que se encuentra abierta al público a través de un régimen de visitas estricto, en el que mamíferos, anfibios, peces, reptiles y aves son exhibidos en jaulas, corrales o peceras a una distancia prudencial de sus espectadores. Esto garantiza tanto el completo disfrute de las especies en calidad de atracciones como la total seguridad de los individuos. Etimológicamente, la palabra “zoológico” proviene de Zoología, la cual deriva de la conjunción de dos conceptos de la lengua griega. Por un lado, “zoo”significa “animal”, mientras que la desinencia “logos” remite a la idea de estudio o disciplina. Es decir que se trata de la ciencia dedicada al estudio de los animales, más específicamente a la observación, clasificación y nombramiento de las distintas especies que pueblan la Tierra.

Estas instalaciones se caracterizan por la presencia de grandes espacios sectorizados y perfectamente cerrados en los que diferentes animales, separados por especie, comparten la vida cotidiana. Cada uno de estos sectores intenta recrear de manera artificial el hábitat natural de cada especie, de manera tal que la misma no se altere frente a los cambios y pueda mantener patrones de conducta similares a los que presentaba cuando se hallaba en libertad. En el caso de las criaturas nocturnas, por ejemplo, los encargados de estos centros suelen poner especial reparo en sus necesidades y construir estructuras que modifiquen artificialmente sus hábitos de sueño. Así, es común observar a estas especies dentro de espacios oscuros iluminados con luces tenues durante el día, para que se mantengan despiertos y puedan ser observados, y con incandescencias fuertes durante la noche, para que puedan conciliar el sueño.